El origen del Mesón Sancho se remonta a 1969, cuando abrió sus puertas por primera vez. Fue en 1977 cuando José Antonio Aladro tomó las riendas del restaurante junto con su mano derecha en el negocio, José Manuel Suárez, y poco a poco hicieron del mesón un restaurante de referencia en Gijón. Se jubilaron 40 años después y sus hijos se hicieron cargo del restaurante.
En el Mesón Sancho la tradición sigue siendo la marca de identidad, y es por ello que se sigue manteniendo su singular estética y se continúan degustando las mismas especialidades que en sus primeros días, siempre aprovechando las mejores técnicas de nuestros tiempos.
La alta calidad de la materia prima es imprescindible en nuestros platos, ya que nuestras elaboraciones procuran resaltar las cualidades originales de nuestros productos.
Además de los platos tradicionales, la carta se ha ido nutriendo de nuevos platos, aumentando ligeramente la oferta gastronómica del establecimiento, y asegurando siempre la frescura del producto. Se trata de una parrilla de carbón en donde se trabajan las carnes entre las que principalmente se puede encontrar el chuletón de vacuno mayor, la paletilla de cordero, o la casquería. La otra parte de la carta está compuesta por los pescados. La oferta diaria depende de los productos que se encuentren disponibles en las rulas locales, siendo habitual el pixín, la lubina o el rubiel. En el verano cobra gran protagonismo la ventresca de bonito.
Para garantizar el mejor servicio posible, es aconsejable reservar.